MENSAJE : EL PRÓDIGO
71 Pero esa es la actitud de los jóvenes hoy: “Quiero hacer como los demás”. Nunca tome Ud. el ejemplo de ellos; tome el ejemplo de Él. 72 Entonces lo oigo decir… Oigo al padre decir: “Bueno hijo, ésta es la única forma que tengo de ganarme la vida. Éste es el único sustento”. “Bueno, yo tengo una herencia, dámela. Mis derechos...” ¿Cuál es tu derecho?
73 Puedo ver a ese pobre padre anciano; eso le molestó mucho. “Bueno, ¿qué vas hacer, hijo?” Él dijo: “Voy a irme a la ciudad, y voy a vivir como los demás”...
74…“Quédate con tu madre y conmigo, nosotros te amamos con todo nuestro corazón, y queremos ser tan buenos como podamos. Hemos hecho todo lo que podemos”. Pero eso no le satisfacía. Satanás había agarrado al muchacho. Así que él iba a irse a la ciudad a vivir como los demás mundanos.
75 Puedo ver a su padre decirle a la madre: “Mamá, ¿sabes qué pasa? Nuestro hijo se ha juntado con las malas compañías. Y él ya es un joven, y me ha pedido que venda la hacienda y tome todo lo que yo tengo y lo compartamos con él y su hermano”.
76 Puedo ver a la madre anciana. (Dios bendiga a esas queridas hermanas ancianas). Yo tengo una de ellas en casa. Cuánto la amo en esta noche... ayer, y ella ha sido tan buena conmigo, me gusta mirar... Su madre no tiene... me lleno de gozo y paz cuando vamos allá por unos cuantos… Y el dijo: “Mamá, yo necesito ir...”
77 Esta madre anciana, puedo verla aquí en esta historia, mientras la vemos ir a su hijo y decirle: “Hijo, mamá ha lavado mucha ropa, y ha planchado y tratado de cuidarte...
78 “Ahora, yo aprecio eso, mamá, tú simplemente… Eso es antiguo. Yo no quiero nada así. Voy hacer las cosas a mi manera. Ya casi tengo la edad. Voy a hacer esto a mi manera”.
79 Puedo verla poner sus brazos alrededor de él y abrazarlo. Ella lo amaba y volteó la cabeza... Él no quiere un beso en público... Sin afecto... Postreros… La Biblia dice que ellos serían así. Pablo dijo que serían sin afecto natural. Así es hoy. Ahora el hijo gobierna el hogar en vez de los piadosos... Ellos son los que llevan la conversación. Es extraño: Sin afecto natural
80 Puedo ver a la madre… Ella miró a su hijo: “Un día de éstos... y él piensa que el mundo de...” Ese papá anciano con el que te avergonzarías sentarte en… cruce hacia la iglesia… Ese amigo y esa amiga con los que vas a la iglesia diciendo: “Bueno, miren, amigos, ¿no es eso terrible?”. ¿Te avergüenzas un poco de él? Habrá un tiempo cuando no te avergonzaras de eso.
81 No hace mucho, una jovencita regresó del colegio. Su madre había lavado sobre una tabla para enviarla al colegio. Y cuando ella llegó a la estación, trajo a una jovencita con ella, y ella se había alejado de Dios y de la iglesia. Esta jovencita estaba con ella. Y esa jovencita estaba sentada en el tren mirando por la... Allí estaba su madre afuera; ella estaba toda llena de cicatrices. Y la joven estaba mirándola desde el tren, finalmente dijo: “Mira a esa vieja horrorosa”. Era la madre de la muchacha. Dijo: “¿No es ella horrible? Pues, ¿no detestarías tener que sentarte a la mesa con ella para comer?” Esa era su amiga.
82 Ahora, en vez de la muchacha hablar con franqueza, volteó la cabeza. Y cuando se bajó del tren, esta vieja y arrugada mujer corrió hacia ella, y extendió sus brazos alrededor de ella, y la besó. Y la muchacha la rechazaba. Y ella se había alejado de ella, se había alejado de la iglesia y de Dios. Y ella estaba tan fría; le dio la espalda a la señora. Ella le dijo: “Mi amor, mi amor, ¿qué te ha sucedido?” Y ella tenía tanta pena por causa de su amiga…
83 En ese momento, uno de los conductores que conocía la historia, se acercó y agarró a la joven por los hombros y le dijo: “Mira, tú... ¿Qué quieres decir?” Dijo: “¿Te avergüenzas de tu madre desde que has estado ausente allá en el colegio?” Le dijo: “Recuerda, tú conoces la historia. Un día la casa se estaba quemando. Tu madre era una mujer hermosa, mucho más hermosa de lo que tú eres, o que serás”. Y le dijo: “Tú eras una niñita muy pequeña. Cuando ella estaba colgando la ropa en el patio trasero, y de repente toda la casa se incendió. Y vinieron los bomberos a apagar el fuego. Y la casa estaba en llamas. Y tú estabas llorando en el piso de arriba. Nadie se atrevía a atravesar las llamas. Y esa madrecita se cubrió y corrió adentro través de esas llamas y te agarró. Se quitó la ropa de su cuerpo y te envolvió el rostro, y te cubrió toda, y puso sus brazos y colocó su propio rostro hacia las llamas. Y ella fue a rescatarte a través de las llamas. Por eso es que tú eres bonita hoy, y ella está llena de cicatrices. ¿Te avergüenzas de esas cicatrices?”
84 Eso fue lo que Jesús hizo por nosotros. Cuando nosotros éramos pecadores, feos delante de Dios, desechados, rechazados, Él vino, el amoroso Hijo de Dios, de los palacios de marfil, descendió a la tierra y tomó la vergüenza y el pecado sobre Sí mismo, y murió clamando allá en el calvario.
85 ¿Debería yo avergonzarme de Su Evangelio? Los cristianos en la calle se avergüenzan de pararse firme por el Evangelio. Pero Él fue desfigurado y afeado para que Ud. pudiera ser libre. Él fue desfigurado por el pecado para que Ud. pudiera ser libre del pecado. Nunca lo niegue Ud. a Él. Ámelo siempre. Párese por lo que es correcto. Párese por Su Evangelio.
86 Y ahora, esa es casi la actitud de los jóvenes hoy. Éste joven se sintió de la misma manera, dijo: “Madre, ya no quiero más nada con esta familia. Todo lo que Uds. hacen es ir a la iglesia. Eso es todo lo que oigo...87 Miren. Puedo ver al padre anciano poner un anuncio de venta. Por supuesto, estamos dramatizando esto un poco para los jóvenes. Entonces puedo verle poner un anuncio para vender la hacienda, y juntar todos los bienes, y repartirlo entre los muchachos. El padre y la madre apenas vivirían, quizá, mientras durara la porción, y luego habría terminado
88 Noten, puedo ver cuando ellos le repartieron la porción al muchacho, y él se metió el dinero en el bolsillo y dijo: “¡Ahora sí que me divertiré!”.
108 Puedo ver a este muchacho. Ahora él apacentando cerdos. Aquí está en el corral de cerdos, alimentándolos y comiendo de esta misma cubeta de desperdicios. Apacentando a los cerdos... Imagínense, lo que él había dejado y lo que tenía ahora. Y la porción que él había gastado era realmente la de su padre que él se había ganado. Pero aquí estaba él en el corral de cerdos. Todo lo que él podía oír era el gruñido de los cerdos.
109 Así es en esta noche con esta nación. Hay muchos hijos de madres allá en las tabernas ahora, regados en todos los lugares de mala fama. Muchas jovencitas prostitutas en las calles... Porque se alejaron del hogar, se alejaron de Dios, se alejaron de la Biblia, se alejaron de Sus enseñanzas, se fueron a vivir con el resto del mundo. Manténgase Ud. alejado del mundo.
110 La Biblia dice que si Ud. ama al mundo o las cosas del mundo, el amor de Dios ni siquiera está en Ud. Aléjese de eso. Y mientras el deseo esté en su corazón para hacer eso, regrese al altar. Amén. Quédese allí hasta que todo eso se haya ido. ¡Oh, hermano! Esa es la clase de religión chapada a la antigua de la que estoy hablando, tratando de quitar el deseo de Ud.